La Corte de Apelación del Departamento de Justicia en la región Este se reservó el fallo para el 18 de agosto a los acusados de secuestrar, matar y luego lanzar los cuerpos de choferes de distintas ciudades en una fosa común en Juan Dolio, en un hecho que estremeció el país en 2016.
Los condenados a 20 y 30 años, apelaron la decisión del tribunal colegiado de Primera Instancia de San Pedro de Macorís, procurando ser absuelto, perdonado o bajar las penas impuestas por los jueces.
Las acciones criminales llevadas a cabo en el mes de mayo del 2016, llevaron a los jueces a aplicar condena a 30 años a los verdugos Hugo Antonio Zorrila Alfonseca, Radhamés Ramírez, mientras que los procesados a 20 años por complicidad fueron Luz Divina Martínez Pimentel, Jaime Valentín Encarnación Figuereo y Samuel de Jesús Peña (Bocio).
Los mismos fueron condenados además a pagar una indemnización de más de 200 millones de pesos.
La banda está acusada de las muertes de los choferes Vidal Dionisio Berroa Manzueta, Jary Wilson Rodríguez, Germán Arredondo Quezada y David Polanco.
Los delincuentes utilizaban subterfugios para convencer a los conductores a realizar viajes ficticios, que finalmente lo llevaban a pasar por un suplicio, muerte y posteriormente sus cuerpos lanzados a la fosa.
Los familiares demandan a las autoridades judiciales mantener en la cárcel a los asesinos.
Familiares de las víctimas esperan que la decisión de los jueces está apegada al buen derecho y se ratifiquen las condenas a “los malvados”, que según dijeron actuaron movido por el dinero, sin pensar a las familias que estos dejaban tras sus muertes.