Berlín .- El autor del ataque el miércoles en las inmediaciones de una sinagoga de Halle, en el este de Alemania, que dejó dos muertos, ha confesado los hechos y que actuó por motivaciones antisemitas y ultraderechistas, informó hoy la cadena pública ARD.
El acusado, Stephan Balliet, de 27 años, declaró exhaustivamente y durante horas al comparecer ayer ante el juez de instrucción, agrega la cadena.
En su declaración no hizo alusión a posibles cómplices.
Balliet, que se encuentra en prisión preventiva, está acusado de doble asesinato por las muertes de una mujer, de 40 años, que pasaba por delante de la sinagoga, y un joven, de 20, que se encontraba en un cercano establecimiento de comida rápida en el que irrumpió el agresor, y de intento de asesinato en nueve casos.
Según la investigación, el autor del ataque quería perpetrar una masacre e incitar a imitadores a cometer actos extremistas y antisemitas similares.
La investigación se centra ahora en determinar “si había personas involucradas en los preparativos o en la ejecución del atentado o tuvieran conocimiento previo de ello”, indicó ayer la Fiscalía federal.
Hasta el momento faltan “indicios reales suficientes” para afirmar que el acusado contaba con vínculos o mantenía algún tipo de relación con alguna organización ultraderechista, por lo que las autoridades consideran, al menos por ahora, que actuó en solitario.
Antes de matar a sus dos víctimas, Balliet había intentado acceder a tiros sin éxito a la sinagoga, en la que se encontraban 51 personas celebrando el Yom Kipur, la principal festividad judía.
En su huida hirió además a una mujer de 40 años y a un hombre de 41, que se encuentran hospitalizados con lesiones de bala.
En tanto, el semanario “Der Spiegel” reveló hoy que durante un registro realizado en la vivienda del padre de Balliet la policía encontró una impresora 3D que el ultraderechista pudo posiblemente haber utilizado para fabricar las armas que empleó en el ataque.
Según la investigación, todo apunta a que Balliet, quien estudió la carrera de química durante unos semestres, fabricó gran parte de las armas de fuego que utilizó durante el atentado.
En el registro de la vivienda de la madre, con la que convive Balliet, la policía se incautó de un disco duro.