Washington, EFE.- El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó este miércoles proyectos de ley en apoyo a las protestas de Hong Kong al tiempo que abogó por una solución “amistosa” de las diferencias entre la ex colonia británica y Pekín.
En un comunicado difundido por la Casa Blanca, Trump, que había sugerido que iba a vetar los proyectos, indicó que finalmente los suscribió por “respeto” al presidente chino, Xi Jinping, y el pueblo de Hong Kong.
Trump afirmó que los proyectos se han promovido “con la esperanza de que los líderes y representantes de China y Hong Kong serán capaces de resolver amistosamente sus diferencias dirigiéndose a un largo periodo de paz y prosperidad para todos”.
El primero de los proyectos, conocido como “Ley de Derechos Humanos y Democracia de Hong Kong” y aprobado la semana pasada por el Congreso, tiene como objetivo “proteger” los derechos humanos en la ex colonia británica y que da poderes al Gobierno de Trump para sancionar a funcionarios chinos.
Más en concreto, el texto requiere al Gobierno de Estados Unidos que, a través del Departamento de Estado, certifique una vez al año que China mantiene su trato especial a Hong Kong con el respeto a su autonomía ante el riesgo de sanciones.
La iniciativa también contempla sanciones contra funcionarios chinos responsables de violaciones a los derechos humanos como detenciones arbitrarias, torturas, confesiones forzadas o entregas extrajudiciales, entre otras.
Tras su aprobación por el Congreso, el Gobierno chino dijo que el texto “obvia los hechos, emplea un doble rasero e interfiere descaradamente en los asuntos internos de China” y amenazó con “fuertes represalias” para EE.UU. si finalmente Trump lo firmaba.
Además de este proyecto, Trump también rubricó un segundo texto que prohíbe la exportación de material antidisturbios para las fuerzas de seguridad hongkonesas.
El pasado lunes, el movimiento prodemocrático de Hong Kong volvió de nuevo a las calles para clamar por una mayor libertad, después de que arrasara en las elecciones locales, al lograr 388 del total de 452 concejales de distrito en disputa.
El bando alineado con Pekín sufrió un fuerte batacazo al quedarse con solo 59 concejales, frente a los casi 300 que tenía, mientras que los independientes lograron 5 escaños en los comicios, con una participación récord del 71,2 %.