Chile dio este miércoles un importante paso hacia el matrimonio igualitario, luego de que el Senado del país austral aprobara legislarlo próximamente, un hecho que las asociaciones LGTBI y gran parte del espectro político calificaron de “histórico”.
“El logro de hoy tiene como gran responsable a las organizaciones que llevan décadas exigiendo sus derechos. Desde esa primera manifestación pública en 1973 hasta la última marcha del Orgullo. Un honor poner al Senado a disposición de la igualdad y el amor”, dijo el presidente de la Cámara Alta, el opositor Jaime Quintana.
Por 22 votos a favor, 16 en contra y una abstención, el Senado aprobó el proyecto “en general”, término que se usa en Chile cuando se da luz verde a la idea de legislar sobre un tema concreto, pero aún faltan más trámites parlamentarios hasta que se convierta en ley y articular la iniciativa, lo que se iniciará en marzo y podrá demorar varios meses.
Aún así, nunca antes un proyecto sobre el matrimonio igualitario había llegado tan lejos en el país austral, donde las uniones civiles (pareja de hecho) entre personas del mismo sexo están permitidas desde 2015.
“Si bien este es un primer paso de muchos, era uno difícil. Este avance abre definitivamente la puerta para la aprobación total”, indicó Óscar Rementería, portavoz del Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh), uno de los colectivos LGTBI más activos de Chile.
“Hoy concretamos un pequeño pero importante avance en la legislación que nos acerca a ser un país más justo. Es una buena señal para la democracia en Chile y para la igualdad de derechos de todos sus habitantes”, agregó por su parte la presidenta de la Fundación Iguales, Alessia Injoque.
El Estado chileno se comprometió en 2016 ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) a legislar a favor del matrimonio igualitario y en contra de la discriminación contra el colectivo LGTBI luego de una denuncia del Movilh.
El proyecto aprobado este miércoles fue presentado en el parlamento en 2017 por la entonces presidenta Michelle Bachelet (2014-2018), pero su discusión fue progresivamente pospuesta hasta ahora.
“Quiero pedir disculpas a todas las organizaciones y a las personas, chilenas y extranjeras, que han tenido que irse de Chile a contraer matrimonio, porque este país se los ha impedido”, indicó el senador Felipe Harboe, del centroizquierda Partido por la Democracia (PPD).
En el mismo sentido se manifestó Felipe Kast, uno de los pocos senadores oficialistas y conservadores que votó a favor del proyecto y que lamentó “lo tarde que llegamos a este paso” y “no haber entendido antes la importancia del respeto y la diversidad”.
“El matrimonio igualitario es un avance civilizatorio que lleva a respetarnos”, agregó por su parte el senador y presidente del Partido Socialista (PS), Álvaro Elizalde.
El pasado 28 de diciembre se celebró el décimo aniversario del primer enlace homosexual en Latinoamérica, que se celebró en la ciudad argentina de Ushuaia.
Desde entonces, varios países de la región han seguido la estela de Argentina y han legalizado el matrimonio entre personas del mismo sexo, entre ellos Brasil, Ecuador, Colombia, Uruguay o algunos estados de México.