La escogencia de Bautista Rojas Gómez (FP-Hermanas Mirabal) como el representante de la segunda mayoría en el Senado para integrar el Consejo Nacional de la Magistratura, coloca a la entidad que lidera Leonel Fernández en posición privilegiada para poder negociar cuota de representación a la hora de escoger a los integrantes de las Altas Cortes.
El voto de Rojas Gómez tiene mucho valor debido la correlación de fuerza entre el gobernante Partido Revolucionario Moderno y el Partido de la Liberación Dominicana.
Pese a que el CNM está integrado por ocho miembros, Rojas Gómez representa un voto decisivo en el CNM para inclinar la balanza.
El PRM tiene tres votos, que son: los presidentes de la República, Luís Abinader; el del Senado, Eduardo Estrella y de la Cámara de Diputados, Alfredo Pacheco.
Mientras que el PLD tiene tres votos. Estos son: el presidente de la Suprema Corte de Justicia, Luís Henry Molina; la jueza Nancy Idelsa Salcedo Fernández, quien será la secretaria del CNM y el diputado representante de la segunda mayoría en la Cámara Baja.
Los otros dos integrantes son especie de agentes libres: la procuradora Miriam Germán Brito, etiquetada de independiente, pero a todas luces no haría causa común con el PLD y sí podría hacerlo con el PRM, pues le debe el puesto al presidente Abinader. La otra pieza es Bauta Rojas y brilla en todos los escenarios.
LOS ESCENARIOS. El representante de Hermanas Mirabal tiene el voto de inclinar la balanza y aparentar decisiones unánimes o cerradas, dependiendo con que bando juegue.
Los posibles escenarios plantean que si al momento deseleccionar a los miembros de la SCJ, TSE y TC Bautista Rojas decide votar en el bando del PRM y Miriam como independiente, entonces las decisiones serían 4 a 3 a favor del PRM sobre el PLD.
Un segundo plano es que si Miriam también vota aliada al oficialismo, entonces los resultados serían más holgados: PRM 5, PLD 3
Un tercer cuadro es que si Bauta Rojas decide pactar con el PLD y Miriam Germán como independiente, entonces las decisiones serían a favor del PLD 4 a 3 sobre el PRM y de entonces los morados impondrían sus favoritos.
Un cuarto escenario plantearía un tranque (4 a 4), esto es si Miriam vota en el bando del PRM y Bauta en el PLD, entonces el voto de Abinader valdría por dos, pero la decisión sería por la mínima y en cierto modo no es convincente frene a la población.
De manera que la Fuerza del Pueblo tiene el voto con que negociar representantes a la hora de escoger a los miembros de las Altas cortes.