Un nueva riña colectiva con un detenido se produjo esta semana en una terminal del Aeropuerto Internacional de Miami (MIA) pocos días después de otra a puñetazos que involucró al menos a siete personas, una tendencia que comienza a preocupar a las autoridades.
El altercado se produjo el pasado martes por la noche en el mostrador de la aerolínea Southwest Airlines por causas todavía no aclaradas, pero acabó con el arresto de una persona, según medios locales.
La pelea comenzó entre pasajeros que se vieron obligados a descender de un vuelo de la citada aerolínea con destino a Chicago por conducta desordenada, tras una confrontación que fue escalando al parecer por una mujer que se quejaba de su asiento.
El director y CEO del MIA, Lester Sola, expresó este viernes en un comunicado su preocupación por el “aumento sin precedentes este año en el país del comportamiento indisciplinado de los pasajeros”.
Sola citó un informe de la Administración Federal de Aviación de Estados Unidos (FAA) para señalar que los incidentes por “comportamiento indisciplinado de los pasajeros” han aumentado de 100 a 150 casos en un año promedio, a 1.300 en lo que va de 2021.
En el MIA, que se encuentra bajo la seguridad de una unidad del departamento de Policía del condado de Miami-Dade, se han registrado 81 altercados con pasajeros y cinco arrestos desde enero pasado, dijo el oficial Jesús Ramírez, según recogió el diario The Miami Herald.
La riña del pasado 26 de abril en la terminal D del MIA, que dejó una persona herida y otra detenida, fue grabada por otros pasajeros con sus móviles.
Las imágenes registradas mostraron dos peleas masivas ocurridas delante de la puerta 14 de la terminal D, donde están las ventanillas de American Airlines, ante la mirada de otros viajeros que guardaban la distancia.
Testigos del hecho señalaron a los medios que el detonante de las peleas fue una discusión por la disposición de asientos en un vuelo.
El pasado miércoles, la FAA propuso sanciones civiles contra cuatro pasajeros de aerolíneas por supuestamente interferir y, en dos casos, agredir a los asistentes de vuelo que les pidieron que obedecieran las instrucciones de la tripulación de cabina y varias regulaciones federales.
Las sanciones van desde 9.000 a 32.750 dólares, indicó la FAA en un comunicado.
Fuente: EFE