Por Massiel Bravo.- El diputado del Partido Revolucionario Moderno (PRM), Miguel Gutiérrez, preso en Miami por cargos de narcotráfico, durante la campaña electoral promovió ser un hombre cristiano, cuya gestión estaría conducida por valores como la humildad y la verdad.
El entonces candidato a diputado por el Partido Revolucionario Moderno fue a diferentes programas televisivos y radiales en Santiago, hablando de honestidad, principios, compromisos con su pueblo y vocación de servicio.
Durante una entrevista en la campaña electoral del año pasado, Gutiérrez afirmó que la singularidad de su propuesta radicaba en trabajar por una diputación regida por principios de Dios, afirmando que siempre abogaría en pos de la verdad, sin vender ilusiones ni mentiras a aquellas personas que lo eligieran.
Durante la campaña electoral, ya las autoridades de Estados Unidos le seguían los pasos por introducir a su territorio toneladas de cocaína, junto a sus socios dominicanos, colombianos y estadounidenses. Aun así, se promovía como un hombre de bien, que de llegar al Congreso sería un genuino representante del pueblo, dejando claro que personalmente no tenía problemas de dinero.
Por otro lado, manifestó que al compartir sus ideales de dedicarse por cuatro años al servicio público, muchos familiares y conocidos le exhortaron no hacerlo, ya que la política en el país arrastra consigo muchos antivalores.
También decía que las personas serias son las que deben incurrir en la actividad política, pues son las que le hacen bien a la sociedad.
En otro momento, afirmó que la política por sí misma no es dañina ya que la esencia de esta es servir y que el problema radica en las personas que incurren en esta para defender sus propios intereses.
En ese tenor, durante los procesos de campaña enfatizó mucho en el hecho de que entendía prudente dedicarse a la política para dejar un legado de servicio público en su familia.
Gutiérrez defendía los valores patrios y a sus comunidades, no para abogar por sus “propios bolsillos”.
Gutiérrez, quien es inversionista de la compañía MAGD con acciones que superan los 100 millones de pesos, durante su campaña habló de la pulcritud de sus empresas, alegando que desde los 16 años ha servido a área privada del país, al día con el paga de sus impuestos y que en el área de la construcción le ha brindado mucha riqueza a la República Dominicana.
Recientemente, posteó en su cuenta de Instagram una imagen donde manifestaba que el valor de cada persona no queda definido por las palabras sino por sus propios actos.
El jurado federal de Miami emitió contra el diputado una acusación formal, con fecha del 11 de marzo del presente año, donde señala que este operaba desde 2014 en una red transnacional de drogas que se extiende desde República Dominicana hasta Colombia y Estados Unidos.
