Un portavoz de Defensa de Estados Unidos dijo este martes que el Pentágono está intentando comunicarse con los jefes militares chinos, luego de que informes de prensa señalaran que Pekín ha rechazado llamados por asuntos de protocolo.
Tres llamados del secretario de Defensa Lloyd Austin fueron rechazados en sendos intentos de comunicarse por teléfono con sus pares chinos, según un informe del Financial Times que no fue desmentido.
El diario Global Times, aliado del gobierno chino, informó que si bien Pekín está abierta a discusiones militares bilaterales, Austin había intentado conectarse con Xu Qiliang, el poderoso vicepresidente de la Comisión Militar Central, el órgano del Partido Comunista de China que supervisa a las fuerzas armadas, en lugar de hacerlo con el ministro de Defensa del país, Wei Fenghe.
La intención de Austin de buscar una conexión con Xu, quien es cercano al presidente Xi Jinping, fue “un acto poco profesional y hostil de ignorar el protocolo diplomático y la práctica común internacional”, escribió el Global Times, que a menudo refleja las opiniones oficiales.
El portavoz del Pentágono John Kirby confirmó que Austin no se ha comunicado con los principales jerarcas militares de China. “Ciertamente deseamos tener un diálogo con nuestras contrapartes en Pekín, y todavía estamos trabajando en cómo será exactamente y cómo sucederá”, dijo el martes.
El Pentágono ha sido abierto sobre su deseo de tener discusiones bilaterales de alto nivel con China en medio de un aumento de las tensiones entre ambas partes.
En tanto, Washington mantiene una fuerte presencia militar en la región, especialmente con despliegues navales, dejando claro su rechazo al reclamo de Pekín sobre territorios en disputa en el Mar de China Meridional, su amenaza de retomar por la fuerza el control de Taiwán, aliado de Estados Unidos, y de extender su presencia militar más allá de Asia Oriental.
Mientras tanto, China ve el paso regular de barcos estadounidenses por el Mar de China Meridional y el Estrecho de Taiwán como una amenaza a su soberanía, pues considera a Taipei como un asunto interno.
Los frecuentes patrullajes de la fuerza aérea china en el espacio aéreo regional de Taiwán, y el suministro continuo de equipos de defensa avanzados de Estados Unidos, han generado preocupaciones de que la isla podría agravar los roces entre las dos superpotencias.
Las relaciones entre las fuerzas armadas de ambas partes disminuyeron desde que el exsecretario de Defensa de Estados Unidos James Mattis visitó Pekín en junio de 2018 para intentar mejorar la comunicación.
Esas discusiones no dieron frutos y el sucesor de Mattis, Mark Esper, no pudo concertar una reunión con su homólogo el año pasado.
Se esperaba que Austin y Wei conversaran a principios de junio en la Cumbre de Seguridad de Asia, conocida como el Diálogo de Shangri La, pero el evento fue cancelado la semana pasada debido a la pandemia.
AFP
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