Una empresa emergente de Nueva York ha diseñado un sistema de transporte aéreo alternativo a los aviones que cubriría en una hora la distancia entre las ciudades de Los Ángeles y San Francisco. Esta vez no se trata de un dirigible, sino de una “clase diferente” de vehículo eléctrico de despegue y aterrizaje vertical (eVTOL, por sus siglas en inglés), según afirma el desarrollador, Kelekona, en su sitio web.
La aeronave, de la cual ningún prototipo ha despegado hasta el momento, tendría una capacidad para transportar a 40 pasajeros más un piloto o portar 4,5 toneladas de cargamento, detalla New Atlas. La distancia entre ambas urbes californianas permiten calcular que la velocidad del vehículo, proporcionada por ocho hélices de canal distribuidas en cuatro bloques de dos, sería superior a los 500 kilómetros por hora.
El concepto de aeronave no tiene alas, sino que se sirve de un fuselaje aplanado con forma de gota, si se observa desde arriba, para conseguir el equilibrio y las características aerodinámicas necesarias. Además, la inclinación de sus parejas de hélices le permitiría generar el denominado empuje vectorial y avanzar con cualquier tipo de viento.
El cuerpo del eVTOL, elaborado con un compuesto de aluminio, estaría impreso en 3D. Sus vuelos de larga duración requerirán de unas potentes baterías de litio, que Kelekona asegura que se podrán reemplazar con rapidez y recargar fácilmente.
Un estudio concluyó que las emisiones de gases de efecto invernadero generadas por vehículos voladores similares en desarrollo pero de tamaño menor, destinados a cuatro ocupantes, son comparables a los niveles emitidos por los coches con motor de combustión interna.
Los investigadores compararon todas las cadenas de transmisión de energía desde el pozo petrolífero hasta el eslabón del vehículo en movimiento (well-to-wing/wheel) y calcularon que viajar 100 kilómetros en un transporte eléctrico de despegue y aterrizaje vertical con un piloto genera unas emisiones un 35 % más bajas que un coche no eléctrico con sus 4 plazas ocupadas. Sin embargo, esas emisiones resultan un 28 % más altas que las producidas por un auto de motor de combustión interna ocupado por una sola persona.
El eVTOL de Kelekona tendrá que competir con varias otras reencarnaciones de los antiguos zepelines. En los últimos años, varios equipos han presentado diseños de dirigibles capaces de transportar hasta cientos de toneladas de carga o decenas de pasajeros, como la propuesta de los ingenieros aeronáuticos del consorcio ruso Roselectrónika, el Aerosmena 200, con una reconocible forma lenticular.
Un concepto de menor capacidad es el del proyecto Airlander 10 de la empresa británica Hybrid Air Vehicles, la cual asegura que podría transportar a unos 90 pasajeros o hasta 10 toneladas de carga desde el centro de Barcelona a Palma de Mallorca en 4 horas y media. Los desarrolladores también afirman que para el 2025, el Airlander será el transporte aéreo con la menor emisión carbónica de entre todas las aeronaves existentes.
Fuente: RT