Santo Domingo.- A pesar de que nueve grupos hoteleros están interesados en construir en Pedernales, donde se ubica Bahía de las Águilas, no se tiene contemplado que se toque una de las zonas vírgenes más exhuberantes de la nación.
Pedernales se convertirá “en un destino por excelencia para los turistas nacionales y extranjeros”, afirmó el mandatario y dijo que, aunque se construirán habitaciones de lujo, se respetará el medioambiente.
“Hoy es el inicio de convertir a Pedernales en un destino mundial, líder en turismo de conservación y un modelo de desarrollo sostenible”, dijo el presidente en su discurso.
El gobernante dejó inaugurados los trabajos de construcción de obras viales en Pedernales, entre ellas la reconstrucción y ampliación de la carretera Enriquillo-Pedernales, con una longitud de 73 kilómetros, y el tramo vial que une a Cabo Rojo con Bahía de las Águilas.
Inicialmente, de acuerdo con Abinader, se invertirán 1,000 millones de dólares, fruto de una alianza público-privada, que se elevarán a 3,000 millones de dólares en 10 años.
En la primera etapa se contempla la construcción de un aeropuerto internacional, infraestructuras y vías de acceso necesarias, además de la construcción de un hotel con 3,000 habitaciones en el farallón de Cabo Rojo, perteneciente a la provincia de Pedernales.
Las primeras obras del hotel, con un coste de unos 30 millones de dólares, correrán a cargo del Gobierno dominicano, pero está previsto que luego el inmueble pase a manos de inversores privados.
El plan inicial es construir 3,000 habitaciones, pero las ofertas se han incrementando hasta las 6,000 en una primera etapa y a 12,000 al final del plan, de acuerdo con el presidente.