En 2020, un equipo de investigadores de la Oficina Nacional de Investigación Económica encontró evidencia que sugiere que si no se reducen las emisiones de gases de efecto invernadero, las futuras olas de calor podrían matar a millones de personas en todo el mundo.
En su artículo, los expertos describían cómo compararon las muertes relacionadas con el calor en varios países durante las olas de calor pasadas con las temperaturas futuras proyectadas para obtener más información sobre las posibles muertes en el futuro. El escenario es bastante preocupante.
Pero, ¿Cómo puede matarnos el calor?
Primero, hay que tener en cuenta que el calor extremo puede perjudicar a cualquier persona de cualquier edad, aunque los ancianos, las personas con enfermedades crónicas, aquellos pertenecientes a familias de bajos ingresos, los trabajadores que realizan su labor al aire libre y los atletas que compiten en condiciones de calor extremo, se encuentran entre los que corren mayor riesgo.
Hipertermia
La hipertermia tiene lugar cuando el sistema de regulación del calor corporal se ve abrumado por el calor externo, lo que hace que la temperatura interna de una persona aumente. Nuestra temperatura corporal central es de aproximadamente 37 ° C y, en condiciones normales de salud, nuestros cuerpos generalmente pueden soportar variaciones de aproximadamente 3,5 ° C. Sin embargo, si pasamos este umbral, el organismo comienza a mostrar signos de angustia. El cuerpo suda para mantenerse fresco, por lo que el problema comienza cuando nos deshidratamos o cuando la mezcla externa de calor y humedad se vuelve demasiado alta.
En este escenario, el sudor no es suficiente. A medida que la sangre se mueve hacia la piel, se enrojece en un intento de transferir el calor lejos del núcleo. Conforme disminuyen las reservas de sal, los músculos se contraen y, conforme el cuerpo activa una respuesta inmunitaria, los órganos comienzan a hincharse.
En este punto es posible tener alucinaciones e ideas confusas. Luego, pueden aparecer vómitos, convulsiones y, finalmente, la muerte puede sobrevenir como resultado de un ataque cardíaco o insuficiencia orgánica.
Golpe de calor
También conocido como insolación, puede causar la muerte o daño al cerebro y otros órganos internos. Suele tener lugar como una progresión de enfermedades más leves relacionadas con el calor, como calambres por calor, desmayos y agotamiento por calor.
Es el resultado de una exposición prolongada a altas temperaturas, generalmente en combinación con la deshidratación, que conduce a fallos en el sistema de control de la temperatura del cuerpo. Un golpe de calor también puede aumentar el riesgo de desarrollar una afección cardíaca, un derrame cerebral o problemas respiratorios.
Mantenerse bien hidratado puede servir de protección contra el calor, pero es posible que no evite que la temperatura corporal aumente si el calentamiento interno o externo es excesivo.
El futuro
Para el 2100, la exposición al calor amenazará la salud de aproximadamente 4.000 millones de personas, según un informe de la Organización Internacional del Trabajo publicado en 2020. El informe pronostica que las horas de trabajo productivas del mundo disminuirán un 2,2% debido al aumento del calor, lo que provocará pérdidas económicas de 2,4 billones de dólares, concentradas en el sur de Asia y África occidental.
Fuente: Muy Interesante
