La Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) en un informe de evaluación de estrategia a la Policía Nacional manifestó que la institución cuenta con normas y reglamentos que no son aplicados debido a la “injerencia política o por amiguismo de superiores y subalternos”.
El informe detalla, además, que el reclutamiento de los miembros cuenta con requerimientos establecidos, pero estos se ven vulnerados por el “amiguismo institucional o la influencia política”.
“Existe una distorsión entre la función de la policía, las estrategias sociales de seguridad ciudadana y la interacción con la comunidad dirigidas a proteger y servir a la ciudadanía; siendo torcidas en actividades de seguridad del siglo XIX, dirigidos a asegurar y garantizar la integridad de un segmento de la población”, dicta el documento.
Otro de los males que destaca la UNODC en la Policía Nacional es la injerencia política en el área administrativa, manifestando que la misma afecta el cumplimiento de las estrategias de desarrollo institucional y de seguridad ciudadana.
Asimismo, plantea que dicho entremetimiento da como resultado una desorganización, desmotivación y descontento de las filas castrenses.
Otra de las conclusiones del informe emitido por las Naciones Unidas sobre la institución del orden del país, detalle que los métodos establecidos para entrenar y capacitar a su personal básico no es el adecuado “tomando en consideración que la preparación del personal debe incluir manejo y uso limitado de la fuerza, cultura de derechos humanos, relaciones con la comunidad, acciones operativas, mediación”.