Las interrupciones en el servicio de electricidad a la población de ocho y 12 horas diarias, unido a la falta de sensibilidad y gerencia de las actuales autoridades gubernamentales para resolver la crisis, podrían desatar en el país una ola de estallidos que conducirían a la pérdida del control social, advirtió la precandidata presidencial por el Partido de la Liberación Dominicana (PLD), Maritza Hernández.
Destacó que el nivel de crispación y desesperación que viven los habitantes de la mayoría de los barrios, sectores y municipios del país es terrible por lo que demandó a las autoridades del Gobierno poner atención sincera a la solución de ese problema.
La ex ministra de Trabajo resaltó que la incompetencia y la falta de sensibilidad mostrada por el equipo de Gobierno para ofrecer una solución satisfactoria a la delicada situación que padece la población dominicana provoca un estado de desesperación tan grande que lo pone a punto de estallar.
´´Demandamos de manera enérgica al Gobierno del Presidente Luis Abinader poner atención a los cotidianos y prolongados apagones de 8 y 12 horas que se están produciendo en la mayoría de barrios, sectores y municipios del territorio nacional¨, exigió la miembro del Comité Central del PLD.
Destacó que los habitantes de barrios y residenciales, así como dueños de negocios se mostraron ayer irritados, desesperados y decepcionados por los inconvenientes que les están creando los prolongados apagones, tras el agravamiento que ha vuelto a sufrir el suministro de electricidad.
Puntualizó que en los últimos días las interrupciones eléctricas son constantes y se prolongan hasta por 12 horas, y en las noches el calor no les permite conciliar el sueño, creándoles dificultades en sus lugares de trabajo y centros de estudios por la falta del sueño reparador.
Agregó que son reiteradas las expresiones de incomodidad y desaliento externadas por amas de casa, dueños de colmados, cafeterías, talleres de herrería, técnicos de electrodomésticos y propietarias de salones de belleza ubicados en los diferentes sectores de la capital, donde los constantes apagones le han trastornado sus actividades.