Alcohol y embarazo; una práctica común que provoca múltiples daños en los bebés

La exposición prenatal al alcohol, una práctica que lastimosamente, es muy común en el país,  provoca daño cerebral, de crecimiento y del sistema nervioso central, problemas de aprendizaje, memoria,  atención, comunicación, vista o audición, o una liga de todas las anteriores, en los bebés.

Así lo explicaron varios especialistas, al participar en el acto de conmemoración del “Día del Síndrome Alcohólico Fetal”, que realiza cada 9 de septiembre el Ministerio de Salud Pública, en honor la fecha que busca sensibilizar sobre el Trastorno del Espectro Alcohólico Fetal (TEAF).

Las autoridades salud manifestaron que se deben propiciar acciones pertinentes para el enfoque del tema TEAF desde el primer nivel de atención, a fin de sensibilizar y concienciar a la población sobre los efectos de este trastorno en niños y niñas, fruto del consumo de alcohol por parte de la madre durante el embarazo.

En ese sentido, el doctor Alejandro Uribe, director de Salud Mental del MSP dijo que el alcohol puede actuar e interferir con el sistema nervioso desde el principio del embarazo, además afectar el desarrollo normal de la criatura. “Nos corresponde como familia y sociedad y además con autoridades de salud, sensibilizar sobre estos temas porque a la larga, quienes resultan afectados son los bebes, efectos que pueden incluso impedirles el desarrollo de una vida plena”.

Así mismo, el galeno Martín Ortíz, director de materno –Infantil del Servicio Nacional de Salud SNS,  motivó a comprometerse,  desde las diferentes áreas de trabajo, en los espacios sociales y políticos, donde se toman las dicciones y se elaboran las políticas públicas en salud, para evitar los efectos del TEAF.

La directora de Salud Colectiva, Yocastia de Jesús, declaró que es importante abordar estos temas desde una visión generalizada para fortalecer la prevención, de manera que se oriente a las embarazadas con algún tipo de dependencia alcohólica en los diferentes centros de salud y sus comunidades, ofreciéndoles capacitación.

Todos los especialistas coincidieron en que las medidas preventivas deben asumirse desde una perspectiva integral con la colaboración de todo el sistema de salud, mediante el establecimiento de estrategias oportunas, servicios adecuados y el apoyo de la sociedad.