Estados Unidos.- La indigencia y la pobreza son una realidad en el país más poderoso del mundo, EE. UU. La política social implementada ha llevado al extremo a más de uno: ancianos, profesionales y familias enteras han terminado en campamentos al aire libre.
Sin embargo, precisamente en contextos de esta índole se pone de manifiesto no solo lo peor del sistema, sino también lo mejor de la naturaleza humana: hay personas de bien dispuestas a consagrarle sus vidas al alivio del sufrimiento de los más pobres.
James, un hombre sin hogar, habla durante un documental para Actualidad RT, sobre las dificultades económicas que ha enfrentado en el último año y su desilusión con la política y la sociedad.
El ciudadano explicó que definitivamente “ha empeorado la situación en EE. UU. debido a la situación económica”.
Asimismo, se entrevistaron a diferentes habitantes en EE. UU., quienes señalaban “deberíamos ser un país de personas libres, pero nos quitan las libertades y no nos dejan disfrutar de ellas, tal vez debido a razones económicas”.
Un ciudadano alegó, “si las autoridades supieran que estamos aquí, no tardarían en enviar a alguien para que nos hiciera fotos, y después vendría la policía con excusas para inspeccionarnos”.
