Bogotá, EFE.- El artista plástico colombiano John Fitzgerald se cosió la boca al iniciar una huelga de hambre en el centro de Bogotá para reclamar al Gobierno más presupuesto para la cultura, la creación de la ley del artista y, al mismo tiempo, rechazar la violencia en el país.
Fitzgerald, que se guarece de la lluvia bajo de una carpa blanca ubicada en una céntrica calle de Bogotá, dijo este jueves a Efe que su protesta también busca que “Colombia levante la voz”.
“Lo que estoy haciendo es por el arte, por la gente”, aseguró y añadió un reclamo al Gobierno porque “los artistas no tienen una pensión” que les permita vivir dignamente.
Comerciantes de la zona y transeúntes expresan apoyo al escultor que comenzó la huelga de hambre el pasado domingo también para protestar contra la violencia de las masacres que en las últimas semanas dejó 43 muertos en los departamentos de Arauca, Antioquia, Nariño, Cauca, Norte de Santander y Valle del Cauca.
Fitzgerald aseguró que pese a que mucha gente ha muerto por el coronavirus y que otros han ido a la quiebra por cuenta de la pandemia hay personas que “no pierden la fe” en sus convicciones y que él tampoco lo hará.
El escultor confía en que Colombia podrá salir adelante porque pese a que tiene problemas de diferente orden el país es “rico en seres humanos”.
El domingo pasado más de cien artistas e intelectuales manifestaron su hastío con la violencia incesante que azota al país en una protesta virtual.
La movilización juntó gente de todo el espectro de la sociedad colombiana cuyo común denominador es el rechazo a las matanzas.
“Esto es un asunto urgente de empatía, de sensibilidad, creo que el país colmó su límite y este es el momento de reaccionar y de conectarse con la necesidad de cuidar la vida, la vida digna, la vida en todas sus formas”, afiró en esa ocasión el músico César López sobre la movilización virtual “Un canto por Colombia. Hasta que amemos la vida”.