El bizcocho de castañas supone una forma diferente de introducir frutos secos en la dieta. Estos alimentos se consideran saludables y está recomendado que aparezcan en la alimentación habitual.
Hay que tener en cuenta que es necesario consumir con moderación todos aquellos platos o postres que cuenten con harinas como ingredientes. Estas sustancias generan picos de azúcar en sangre, lo que a mediano plazo podría afectar la función metabólica. Su ingesta ocasional no genera problemas, pero conviene no abusar.
Receta de bizcocho de castañas
Antes de introducirnos de lleno en la receta vamos a comentarte algunas de las propiedades nutricionales de las castañas, el ingrediente principal. En primer lugar, son alimentos que destacan por su alto contenido en fibra. Esta sustancia es clave para prevenir y manejar el estreñimiento funcional, de acuerdo con un estudio publicado en la revista Alimentary Pharmacology & Therapeutics.
También consigue asegurar el crecimiento de las bacterias que conforman la microbiota, a partir de los procesos de fermentación. Así se promueve una digestión y absorción de los nutrientes óptima. Del mismo modo, se reduce la incidencia de las patologías inflamatorias del tubo digestivo.
Por otra parte, cabe hacer especial mención a la presencia de vitamina E en las castañas. Este nutriente actúa como un poderoso antioxidante. Existen evidencias conforme su consumo regular podría reducir el riesgo de desarrollar ciertas patologías, como las neurodegenerativas.
Asimismo, las castañas también concentran calcio en su interior. Este mineral resulta importante para asegurar una buena salud ósea. Su ingesta se relaciona con una menor incidencia de fracturas de huesos durante la edad adulta, según un estudio publicado en Nutrients.
Ingredientes
- 6 huevos.
- 1/2 litro de leche.
- 250 gramos de azúcar.
- 150 gramos de maicena.
- 250 gramos de castañas peladas.
- Sal y una cucharada de levadura química.
- 75 gramos de mantequilla a temperatura ambiente.
Paso a paso para la elaboración
Hay que comenzar cociendo las castañas peladas en una olla con leche, añadiendo una pizca de sal. Tras aproximadamente media hora a fuego medio estarán lo suficientemente tiernas. En este momento se trituran junto a la leche y se reserva la mezcla para más adelante.
Acto seguido se baten los huevos en un bol. Cuando todos ellos están bien batidos se incorpora el azúcar, removiendo enérgicamente hasta conseguir un color blanquecino y una textura espumosa.
En este momento se junta el contenido del bol con la crema de castañas, la maicena, la mantequilla y la levadura. Se sigue moviendo hasta que la masa se vuelva homogénea.
Ha llegado el momento de engrasar un molde de horno y de introducirle la preparación. Se coloca en el horno precalentado durante aproximadamente 45 minutos a una temperatura de 170 grados centígrados. Antes de retirar el bizcocho de castañas será necesario pinchas con un palillo en el centro y comprobar que sale seco. Es importante dejar enfriar antes de desmoldar.
¿Con qué se puede acompañar?
Son muchas las opciones que pueden servir de acompañamiento al bizcocho de castañas. Una de ellas sería nata montada, aunque también combina bien con chocolate fundido o con cualquier crema de cacao. Las salsas de frutos rojos, como puede ser la de frambuesa, suponen otra gran opción.
Ahora bien, si no quieres incrementar la densidad energética del plato en cuestión, te aconsejamos que busques algún alimento más ligero, como el yogur natural. Así conseguirás incrementar el aporte proteico.
Ten en cuenta que el bizcocho de castañas puede funcionar bien como desayuno, aunque también consumido en los refrigerios de media mañana o merienda. Una buena opción es mojarlo en un tazón de café para variar sus características organolépticas.
Prepara bizcocho de castañas
Es sencillo elaborar el bizcocho de castañas. Ahora bien, te recomendamos que pongas en práctica la receta durante la época de estos frutos secos, ya que así el resultado final será mejor. No es lo mismo si se usan castañas envasadas.
Ten en cuenta que incluir frutos secos en la dieta se considera muy saludable. Estos alimentos se caracterizan por su elevada densidad nutricional, por lo que aportan elementos esenciales para alcanzar un buen funcionamiento por parte de los órganos. De todos modos, te recomendamos que su consumo sea ocasional, ya que se trata de una receta con azúcares añadidos.
Además, conseguirás la energía necesaria para proceder a realizar actividad física de alta intensidad, ya que se trata de una preparación con gran contenido en carbohidratos. Estos nutrientes suponen el sustrato energético para muchos esfuerzos deportivos.
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