La aerolínea de bajo costo estadounidense Southwest, a diferencia de otras compañías aéreas en el país, continúa viéndose afectada por la tormenta invernal Elliot que golpeó Estados Unidos el fin de semana y este martes canceló 2.535 vuelos, el 63 % de los que tenía programados.
“Estamos trabajando, poniendo la seguridad por delante, para abordar con urgencia la interrupción a gran escala, reequilibrando la aerolínea y reponiendo las tripulaciones y nuestra flota para servir mejor a todos los que planean viajar con nosotros”, escribió la compañía en un comunicado difundido ayer.
En la nota, la compañía pedía perdón e insistía en que “tras varios días consecutivos de condiciones meteorológicas invernales extremas en toda nuestra red, los continuos desafíos están afectando a nuestros clientes y empleados de una manera significativa que resulta inaceptable”.
El lunes, 2.909 vuelos de Southwest fueron cancelados, un 71 % del total de los viajes, y mañana hay otros 2.474 aviones de Southwest que se quedarán en tierra, según la página FlightAware que adelanta que para este jueves la empresa reduce las cancelaciones a 658, un 13 % del total de sus vuelos.
Las cancelaciones de Southwest por la gélida tormenta, que forzó la interrupción de miles de vuelos durante el fin de semana debido a las condiciones meteorológicas adversas, contrasta con la rápida recuperación que han mostrado la mayoría de las aerolíneas nacionales.
Según FlightAware, American canceló ayer 14 vuelos y hoy 22; Delta suspendió 276 el lunes y 34 hoy y United 144 el lunes y 66 hoy.
Otra aerolínea estadounidense a la que también le está constando recuperar la normalidad es la de también de bajo costo Spirit, que hoy cancelaba 83 vuelos, el 10 % de los que tenía programados y ayer 176 vuelos, el 21 % de los viajes que tenía agendados.
EFE