Vinculados a la operación Calamar lograron desviar del erario público una cantidad de RD$704,298,350.00, provenientes de cubicaciones adulteradas, según establece el expediente acusatorio del Ministerio Público.
El pago de la referida suma de dinero se encargó de hacerla efectiva el acusado Bolívar Ventura, mediante el cambio de cheques de sus compañías Doiteca S.R., Consorcio Tecnológico de la Construcción (CTC) Diprecalt, CxA, y Construcciones y Diseño, RMM, S.R.L, a nombre de su empleado Luis Joaquín Feliz y luego se procedió a entregar en efectivo dicha suma a la estructura.
Estos cheques fueron cambiados por el empleado de Ventura en el Banco de Reservas, específicamente el Centro de Acopio, y era utilizado por el entramado de corrupción como una especie de caja chica de la estructura.
Cubicaciones adulteradas
De acuerdo al grotesco expediente, que contiene más de dos mil páginas, Francisco Pagán, por orden del ex ministro de Hacienda, Ángel Donald Guerrero, solicitó al ingeniero Bolívar Ventura más recursos ecónomicos y al este negarse por considerarse en estado de quiebra, procedieron a continuar con la modadalida de adulterar cubicaciones, como una manera de no perjudicar al ingeniero financieramente.
En este sentido, los imputados buscaron otras obras ya adjudicadas a Ventura, incluyendo obras con cubicaciones de cierre, en las que falsearon trabajos adicionales que no se realizaron, simulando la legalidad de los pagos a través de los acuerdos de reconocimiento de deuda.
Estos procesos contenían informes de volumetría viciados de falsedad de contenido y violatorios al procedimiento de la OISOE, donde se procedió a realizar los acuerdos de reconocimiento de deudas públicas, adulterando las fechas, establecinedo que fueorn firmados en el 2018, para poder clasificar como deuda administrativa y así poder ser pagado a través del Ministerio de Hacienda.
En este esquema de corrupción estatal participaron de manera directa los imputados José Ramón Peralta, Ángel Donald Guerrero Ortiz, Francisco Pagán Rodríguez, Daniel Omar Caamaño, Andrés Guerrero y Víctor Matías Encarnación.