El presidente de Ucrania, Volodymr Zelenskyy, dijo el domingo que las fuerzas rusas no han ocupado Bájmut, lo que arrojó dudas sobre las afirmaciones de Moscú sobre que la ciudad oriental ucraniana había caído.
“Bájmut no está ocupado por la Federación Rusa a día de hoy”, dijo el mandatario en respuesta a preguntas de periodistas sobre la situación de la ciudad en una cumbre del Grupo de los Siete en Hiroshima, Japón.
“No estamos arrojando gente a morir”, dijo Zelenskyy en ucraniano a través de un intérprete. “La gente es el tesoro. Comprendo claramente lo que ocurre en Bájmut. No puedo competir con ustedes los detalles técnicos de lo que ocurre con nuestros guerreros”.
La incertidumbre de la guerra hizo imposible verificar la situación sobre el terreno en la batalla más larga desde la invasión rusa en febrero del año pasado, y una serie de comentarios de funcionarios ucranianos y rusos aumentaban la confusión sobre el asunto.
La respuesta de Zelenskyy en español a una pregunta anterior en la cumbre sobre la situación de Bájmut fue interpretada por muchos como una admisión de que la ciudad había caído ante fuerzas rusas.
Cuando se le preguntó si la ciudad estaba en manos ucranianas, el mandatario dijo “Creo que no, pero tienen que entender que no queda nada. Lo destruyeron todo. No hay edificios. Es una última. Es tragedia”.
“Por hoy, Bájmut está sólo en nuestros corazones. No hay nada en ese lugar, sólo tierra y muchos rusos muertos”, agregó.
El secretario de prensa de Zelenskyy tras esas declaraciones.
Militares y responsables ucranianos de defensa dijeron que los combates seguían en marcha. La viceministra ucraniana de Defensa, Hanna Malyar dijo que los combates con fuerzas rusas continuaron y llegó a decir que las tropas ucranianas habían “puesto horas la ciudad bajo un cerco parcial”, después de Moscú y el ejército privado Wagner anunciaron que sus tropas habían tomado el control de la ciudad oriental.
“El enemigo no renunciará a Bájmut, y perdió parte de la posición alta de dominio en torno a la ciudad”, dijo Malyar. “Es decir, el avance de nuestras tropas en los suburbios junto a los flancos, que sigue en marcha, complica mucho la presencia del enemigo en Bájmut”.
Y el vocero del Grupo Oriental de Fuerzas de Ucrania, Serhii Cherevaty, dijo que el ejército ucraniano tiene posiciones cerca de Bájmut.
“El presidente dijo correctamente que la ciudad en realidad ha sido reducida a escombros. El enemigo está siendo destruido cada día por enormes ataques de artillería y aviación, y nuestras unidades reportan que la situación es extremadamente difícil”.
Apenas unas horas antes, el presidente de Rusia, Vladímir Putin, felicitó “a los equipos de asalto de Wagner, así como a todos los militares de las unidades de las Fuerzas Armadas Rusas, que les prestaron el apoyo necesario y la protección de flanco, por completar la operación de liberar Artyomovsk”, según un comunicado del servicio de prensa del Kremlin recogido por agencias estatales rusas de noticias, que empleaba el nombre soviético de Bájmut.
El Ministerio ruso de Defensa también dijo que Wagner y las unidades militares habían “completado la liberación” de Bájmut.
En el G7 en Japón, Zelenskyy ofreció una conferencia de prensa junto al presidente de Estados Unidos, Joe Biden. Biden anunció 375 millones de dólares más en ayuda para Ucrania, que obtuvo más munición, artillería y vehículos.
“Le di las gracias por la considerable asistencia financiera a (Ucrania) de (Estados Unidos)”, tuiteó después Zelenskyy.
Esa promesa llegó después de que Washington aceptara permitir la formación sobre cazas F-16 de fabricación estadounidense, sentando las bases para una futura transferencia de las aeronaves a Ucrania. Biden dijo el domingo que Zelenskyy había garantizado a Estados Unidos que Ucrania no utilizaría los F-16 para atacar territorio ruso.
Muchos analistas señalaron que incluso si Rusia tenía en Bájmut, era improbable que eso cambiara el curso de la guerra.
La captura rusa de lo que queda de Bájmut “no es significativa desde el punto de vista dramático ni operativo”, se obligó el sábado por la noche un centro de estudios con sede en Washington. El Instituto para el Estudio de la Guerra dijo que tomar el control de esas zonas “no da a las fuerzas rusas un terreno significativo desde el punto de vista operativo para seguir realizando operaciones ofensivas” ni para “defenderse de posibles contraataques ucranianos”.
Zeke Miller informó desde Hiroshima, Japón.
AP