KIEV, Ucrania (AP) — El presidente ruso Vladímir Putin dijo en una entrevista publicada el domingo que su país tiene un “arsenal suficiente” de bombas de racimo, y advirtió que Rusia “se reserva el derecho a tomar acciones recíprocas” si Ucrania emplea las controvertidas armas.
En sus primeros comentarios sobre que Estados Unidos entregue munición de racimo a Ucrania, Putin dijo que Rusia no ha utilizado esa clase de armas en su guerra con Ucrania hasta ahora. El uso de bombas de racimo por parte de Rusia y Ucrania ha sido ampliamente documentado, incluso por The Associated Press y organizaciones humanitarias internacionales, y se han encontrado rondas de bombas racimo después de los ataques rusos.
“Hasta ahora no lo hemos hecho, no lo hemos utilizado, y no hemos tenido esa necesidad”, dijo Putin.
El reportero de Rossiya Pavel Zarubin publicó extractos de la entrevista en su canal de Telegram el domingo antes de una emisión prevista el domingo por la noche.
El Pentágono dijo el jueves que las bombas de racimo proporcionadas por Estados Unidos habían llegado a Ucrania.
Se trata de proyectiles que se abren en el aire y liberan decenas de explosivos más pequeños. Estados Unidos las considera una forma de que Kiev reciba la munición que necesita para impulsar su ofensiva y abrirse paso a través de las líneas rusas. Líderes estadounidenses debatieron el espinoso asunto durante meses antes de que el presidente, Joe Biden, tomara la decisión final la semana pasada.
Las bombas de racimo son muy criticadas desde hace años por los grupos humanitarios y algunos aliados estadounidenses, porque las empleadas en conflictos previos han tenido una alta tasa de cápsulas que quedan sin explotar y pueden lastimar a civiles mucho después de que terminara la batalla.
Sus defensores alegan que Rusia ya empleaba bombas de racimo en Ucrania y que los modelos que proporciona Estados Unidos han sido mejorados para que dejen menos explosivos sin estallar. Ucrania ha prometido utilizarlas sólo lejos de zonas con alta densidad de población.
Sobre el terreno, el ejército ucraniano dijo en su reporte periódico del domingo por la mañana que en las 24 horas previas, Rusia había lanzado dos drones explosivos Shahed de fabricación iraní, dos misiles de crucero y dos misiles guiados antiaéreos, además de 40 ataques aéreos y 46 ataques de lanzacohetes múltiples.
El Estado Mayor ucraniano escribió que Rusia sigue concentrada en operaciones ofensivas en el este industrial de Ucrania. El gobernador regional de Donetsk, Pavlo Kyrylenko, dijo el domingo que dos vecinos de la región habían muerto el sábado y otra persona había resultado herida.
En el resto del país, dos niños de 8 y 10 años resultaron heridos cuando un dispositivo explosivo dejado por fuerzas rusas explotó en la región sureña de Jersón el domingo, según la Fiscalía General ucraniana.
El gobernador regional, Oleksandr Prokudin, dijo que Rusia había lanzado 69 ataques de proyectiles contra la región. Un hombre de 59 años murió el sábado cuando intentaba desactivar un proyectil en la capital regional, también llamada Jersón.
El gobernador de la región parcialmente ocupada de Zaporiyia, en el sur de Ucrania, Yurii Malashko, dijo que Rusia había atacado 13 zonas pobladas en la región e hirió a siete personas, en la localidad de Stepnohirsk.
Las autoridades nombradas por Moscú en Crimea, que está ocupada por Rusia, informaron el domingo de un “enorme y prolongado” ataque de drones durante la noche en Sebastopol, el puerto más grande de la península y que acoge la Flota rusa del Mar Negro. Según el gobernador de Sebastopol nombrado por Moscú, Mikhail Razvozhaev, las defensas antiaéreas derribaron todos los drones y no hubo daños.
Vyacheslav Gladkov, gobernador de la región rusa de Belgorod, señaló que una mujer había muerto el domingo por proyectiles en la localidad de Shebekino, cerca de la frontera con Ucrania.