La Unión Europea (UE) está avanzando en su plan de utilizar las ganancias generadas por los miles de millones de euros de activos rusos congelados en Europa para enviar armas y fondos a Ucrania, según indicó un alto funcionario este martes.
El jefe de relaciones exteriores de la UE, Josep Borrell, recibió la luz verde para el plan de parte de la mayoría de los cancilleres del bloque, y espera que la UE lo ratifique en una cumbre en Bruselas a partir del jueves.
Kiev está escaso de municiones, y los esfuerzos del gobierno de Estados Unidos para obtener fondos están estancados en el Congreso.
La Unión Europea tiene alrededor de 200.000 millones de euros (217.000 millones de dólares) en activos del banco central ruso congelados en Bélgica en represalia por la guerra.
El bloque de 27 naciones calcula que esos activos generan intereses de alrededor de 3.000 millones de euros anuales. “Los rusos no estarán muy felices. La cantidad de dinero, 3.000 millones anuales, no es extraordinaria, pero tampoco es irrisoria”, dijo Borrell a la prensa.
Un pequeño grupo de países miembros, sobre todo Hungría, se niegan a proporcionar armas a Ucrania, de modo que esas ganancias se dividirían.
Alrededor del 90% del dinero iría a un fondo especial que usan varios países de la UE para reembolsar los fondos por las armas y municiones que envían.
El 10% restante iría al presupuesto de la UE para reforzar la industria de defensa ucraniana. Los países que objetan el envío de armas podrían sostener que no lo hacen, aseveró Borrell.
Bajo la interpretación actual de los tratados de la Unión, no se puede usar el presupuesto para comprar armas, pero el fondo especial llamado ¨Fondo Europeo por la Paz¨ no es parte del presupuesto ni tiene que satisfacer las mismas pautas legales o ser aprobado por el Parlamento Europeo.
El Banco Central Europeo ha advertido en el pasado que la confiscación de activos rusos socavaría la confianza en la moneda euro y los mercados europeos. Pero Borrell dijo que no se tocarían esos activos sino solo los intereses que generan. Añadió que se ha consultado al BCE sobre el plan.
Por su parte, Borrell reconoció este martes que la UE no podrá suplir a Estados Unidos si corta la ayuda militar a Ucrania, aunque insistió en que el bloque debe buscar formas “creativas” de financiación incluyendo la emisión de deuda.
En una entrevista a un grupo de medios, entre ellos Europa Press, el jefe de la diplomacia europea explicó que el escenario en el que Washington disminuya el apoyo a Kiev dejaría en una situación “muy difícil” a las fuerzas ucranianas en su lucha contra la ofensiva de Rusia.
“Ciertamente es difícil pensar que podemos poner 50.000 millones más, que es el apoyo de Estados Unidos. No veo que haya capacidad de la UE de incrementar la ayuda a Ucrania con una cifra equivalente a la de Estados Unidos”, afirmó.
El Alto Representante indicó que, de todos modos, esto sería posible si hubiera la “voluntad política” de redoblar el apoyo a Ucrania pero esto requeriría de ser “más creativos” y buscar “nuevos instrumentos de financiación” para dedicar al gasto en Defensa y a la producción militar.
“Si tenemos el sentido de urgencia, queremos realmente actuar rápidamente y no podemos hacerlo con los recursos anuales, puedes anticiparlo, se llama deuda”, opinó
Precisamente la cuestión de la emisión de deuda conjunta a nivel europeo para financiar el robustecimiento de los Ejércitos y la producción de armamento en Europa sobrevuela el debate después de que el propio presidente del Consejo, Charles Michel se haya abierto a esta posibilidad.