Un tribunal brasileño le impuso una multa de 111,7 millones de reales (unos 33,8 millones de dólares) a Facebook por haberse negado a cumplir una orden judicial para levantar el sigilo de conversaciones en WhatsApp de personas investigadas por la policía, informaron este jueves fuentes oficiales.
“El valor corresponde a la suma de las multas diarias por un millón de reales (unos 303.030 dólares), en valores actualizados, que habían sido establecidas en una sentencia contra la empresa en 2016 por no cumplir la orden judicial de levantar el sigilo”, explicó la Fiscalía en un comunicado.
La multa fue impuesta por la Justicia Federal del estado de Amazonas (norte de Brasil) a petición del Ministerio Público con base en un proceso abierto en 2016, cuando Facebook se negó a divulgar el contenido de conversaciones de personas investigadas por desvíos de recursos públicos del área de la salud en ese estado de la Amazonía brasileña.
En la época, Facebook alegó que no archiva ni tiene acceso a las conversaciones de los usuarios de WhatsApp, aplicación de la que es controladora, por lo que carece de condiciones técnicas para divulgar el contenido de las mismas.
Según la Fiscalía, la multa de un millón de reales tendrá que ser pagada desde el 13 de junio de 2016, cuando concluyó el ultimátum que la Justicia le dio a Facebook para levantar el sigilo, hasta el 20 de septiembre de ese mismo año, cuando la Policía realizó una operación contra los investigados en los desvíos y “cesó el interés público” por el contenido de las conversaciones.
De acuerdo con la Fiscalía, la decisión judicial demuestra la invalidez de los argumentos de la empresa en el sentido de que la multa era “excesiva y desproporcionada” y confirma la posición del Ministerio Público de que el valor es adecuado para una empresa “cuya facturación en tres meses supera los 22.000 millones de reales (unos 6.666,7 millones de dólares)”.
El Ministerio Público ya había conseguido que un juez de Amazonas bloqueara hace dos años 38 millones de reales (unos 11,5 millones de dólares) de las cuentas de Facebook como garantía de que pagaría la multa, pero esa determinación fue suspendida por una cautelar de un tribunal de segunda instancia.
La investigación con la que Facebook se negó a colaborar permitió desmotar una organización acusada de haber desviado 50 millones de reales (unos 15,1 millones de dólares) de recursos destinados a tres hospitales públicos del estado de Amazonas entre 2014 y 2015.
En 2016, Facebook tuvo que suspender provisionalmente sus servicios en Brasil en tres oportunidades en cumplimiento de decisiones de jueces que querían presionar a la empresa a que levantara el sigilo de algunos de sus clientes blancos de investigaciones criminales.
Según la Fiscalía, las medidas contra la red social están acordes con lo establecido por el Marco Civil de la Internet, la legislación aprobada en 2014 y que prevé que las leyes brasileñas sean cumplidas incluso por empresas con sede en el exterior que ofrecen servicios en la red en Brasil.
Fuente: EXTRA