SFM está huérfano de hospital, equipos e insumos ante el COVID-19

La crisis sanitaria que ha desatado el COVID-19 en San Francisco de Macorís radica en el hecho de que no tiene un hospital que pueda hacerle frente a la enfermedad.

Y es que el hospital regional San Vicente de Paul solo cuenta con cuatro ventiladores disponibles que a esta altura, están todos ocupados por pacientes con COVID-19 y, consecuentemente, está incapacitado para recibir más enfermos de gravedad.

En la ciudad se han registrado apenas 59 casos, de los 581 contagiados, pero concentra la mayor mortalidad, pues de los 20 fallecidos en todo el país, 12 están en la provincia Duarte, para un 60%.

Para hacerle frente a la enfermedad, la Red Pública de Hospitales cuenta con 400 ventiladores y para finales de marzo, con los varios pedidos en camino, esa cantidad aumentará a 644 ventiladores que serán usados a nivel nacional.

Sin embargo, a este hospital todavía no ha sido reforzado en capacidad, aun cuando las autoridades ya identificaron la ciudad como la primera de contagio local, y se han extremado los protocolos de vigilancia con medidas como aislar a todas las personas contagiadas y quienes hayan tenido contacto.

El hospital San Vicente de Paul está recibiendo solamente pacientes de baja complejidad del coronavirus, debido a las limitaciones que tiene la Unidad de Cuidados Intensivos. Todavía el miércoles, este centro estaba en proceso de habilitación del área de aislamiento.

Desde este viernes en la mañana, militares han restringido su acceso a la ciudad cabecera.

Solo ayer, el portal de noticias local Telenord registraba siete fallecimientos: el periodista Pedro Fernández, Luis German Rodríguez, de 52 años, Waldo López Sánchez, de 56 años, Santo Páez, de 53, Oscar de la Cruz, de 27, Luz Divina Peralta, de unos 60 años y Marcelino Peña, subdirector del Instituto de Desarrollo y Crédito Cooperativo (Idecoop).

Ante la falta de respuesta por parte de la red pública hospitalaria, han sido las clínicas privadas de esta localidad las que han dado respuesta a los pacientes aquejados con síntomas de la enfermedad. Estas clínicas han tenido que habilitar espacios para recibir a la cantidad de personas que llegan con complicaciones respiratorias.

Algunos pacientes de COVID-19, entre ellos el alcalde electo de San Francisco de Macorís, Siquio Ng y el fallecido Pedro Fernández recibieron atenciones médicas en Santia.