Esperma y placenta de animales en cosmética: ¿realidad o simple marketing?

Diversos ingredientes usados en la fabricación de productos cosméticos o capilares pueden impresionar a las personas y, muy pocos, se lo aplicarían directamente en la piel o el pelo, como el semen de toro.

El listado de exóticas materias primas se amplía pues también abarca mascarillas de heces de ruiseñor para el rostro, secreción del intestino de un cachalote para perfumar el cuerpo, huevas de salmón para exfoliar los ojos, terciopelo de cuerno de ciervo contra la disfunción sexual, baba de caracol, la placenta y el esperma de caballo y ballena.

La directora de la Escuela de Farmacia de Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), Elizabeth Pérez, explicó a N Investiga que el esperma de por sí tiene una sustancia rica en antioxidantes que sí proporciona algunos elementos importantes, pero no de la manera que lo quieren propagar y vender como una panacea.

Aunque algunos especialistas y estudios señalan que son beneficiosos por su alto contenido en proteínas, pero debido a su elevado costo y por cuestionamientos de ecologistas, acuden a ingredientes hechos en laboratorios, empezando por el esperma de ballena, cuyo uso en la cosmética viene desde la década de los 70.

A pesar de que ha sido sustituido por un alcohol cetílico de origen vegetal como el aceite de coco, esta sustancia grasa se sigue mercadeando como esperma de ballena, como mismo lo revela el actor mexicano de 63 años, Eduardo Yañez, al ser cuestionado sobre cuál es su secreto para seguir luciendo joven. “El semen de ballena, dicen que es lo mejor para la piel y todo el rollo. Ahí dicen todas las cremas”.

Como muestra, el programa de investigación mostró una crema para prevenir y combatir el envejecimiento llamada “Esperma de Ballena”. Al leer la etiqueta los ingredientes son Agua desionizada, Butilcarbamato de yodopropinilo, Fenoxietanol, Propilenglicol, Elastina hidrolizada, Colágeno hidrolizado, Acetato de tocoferilo, Aceites de Argan y Jojoba y Palmitato de cetilo o Espermaceti, que es el aceite graso que ha sustituido el esperma de ballena.

En el mercado local también se encuentran otros productos similares.

En el caso del famoso tratamiento del laboratorio HK Cosmético llamado “Baba de Caracol”, en su etiqueta no figura este ingrediente sino el alcohol cetílico junto a otras materias primas comunes como el colágeno hidrolizado, el ácido glicólico, entre otros.

Muchas veces la terminología empleada en las fórmulas cosméticas confunde y se da por hecho que determinadas sustancias son de origen animal sin serlo. Entonces, ¿se trata de un engaño y falsa publicidad o es una simple estrategia de mercadeo?

Karen Tamariz, farmacóloga, explicó que lo que están haciendo simple y llanamente es un marketing con un producto, una forma de llamar al consumidor.

Con relación a las placentas, Elizabeth Pérez dijo en el programa de la periodista Nuria Piera, que podría ser que tenga algunos componentes extraídos de la placenta y que esos derivados o extractos placentarios constituyan algunos elementos que puedan favorecer el cuero cabelludo.

La producción de N Investiga mandó a un laboratorio tres muestras que obtuvo en el mercado local: tratamientos “Semen de caballo”, “Baba de Caracol” y “Placenta de oveja”. Estos fueron los sorprendentes resultados.

Frank Reyes, de Laboratorios Franja, explicó que el de placenta de oveja tiene dos y tres veces, cuatro y cinco veces mayor cantidad de sustancia química que el otro producto.

Se refiere a que el producto de placenta de oveja arrojó altos niveles de cobre que podrían producir irritación del cuero cabelludo hasta otras sustancias cuyo uso constante podrían desencadenar graves enfermedades.

“Aparte del cobre, vemos que hay niveles altos de zinc…hicimos pruebas de nitratos y nitritos, y los nitratos y nitritos son desencadenantes de lo que se llaman sustancias nitrosaminas. Las nitrosaminas son sustancias altamente cancerígenas”, agregó.

Ante esta alerta, fue contactado el laboratorio fabricante del producto a los fines de que respondan a estos resultados, quienes afirmaron que “los indicadores suministrados son para agua para consumo humano, y su producto es un cosmético, con el objetivo de brindar productos de calidad, y acorde con los estándares nacionales e internacional”.

La preocupación surge porque, aunque se vea como simples productos de belleza, pueden repercutir significativamente en la salud. Por eso especialistas hacen estas recomendaciones.

Karen Tamariz, farmacóloga: “Lean las etiquetas de los productos que van a consumir y que una buena nutrición siempre es lo mejor”.

Dra. Jeyce Reynoso, dermatóloga y tricóloga: “No nos automediquemos, que realmente existen tantas cosas en el mercado, pero ya está en cada uno de nosotros pues escoger bien un producto…O sea, todos ya tenemos a la mano un internet y realmente buscar información científica”.

Elizabeth Pérez, “consulten especialistas y si no, por ejemplo, si son productos que se compran en farmacias, que pregunten al farmacéutico. Siempre está bien, bien informado y puede darle una orientación con respecto al uso y las propiedades de esas sustancias que se expenden o se consumen a nivel general”.